El alquiler, que ante era la solución perfecta para los jóvenes y todos aquellos que no podían permitirse la compra de una vivienda se ha convertido en una misión imposible debido a la baja oferta, la alta demanda, los precios desorbitados y el problema de la okupación que hacen que los caseros cada vez aumenten más los requisitos para elegir a un inquilino, lo que da lugar a la proliferación de la falsificación de documentación como las nóminas.
El miedo de muchos propietarios a que sus inquilinos se conviertan en inquiokupas hace que si las nóminas antes eran casi un requisito para acceder a un alquiler, ahora se ha convertido en un imprescindible para garantizar el cobro de las mensualidades pero algunas personas no disponen de ella o sus ingresos son demasiado bajos, por lo que recurren al mercado negro de documentación falsa para hacerse con una que, en muchas ocasiones, engaña a los caseros.
En 120 Minutos hemos localizado a uno de estos especialistas en falsificación que se anuncian en internet y que falsifican nóminas o contratos de trabajo.
"Las nóminas en sí son reales en el sentido de que va todo como tiene que ir, los porcentajes y todo, lo que pasa que es una nómina falsa porque no estás dado de alta en la seguridad social", nos ha contado.
Hasta nos envía algunos trabajos que ha realizado a otras personas para que comprobemos cómo son los documentos que realiza.
Además nos garantiza que no vamos a tener ningún problema ya que nos ampara la ley de Protección de Datos: "Ellos no pueden llamar a la empresa y preguntar si fulanito trabaja ahí porque es un delito y ellos lo saben"; "yo llevo 3 años y pico haciendo esto y siempre pregunto a mis clientes y nunca hubo ningún problema".