La quiebra de empresas que no pueden hacer frente a la inflación y la propia subida de los precios en genral están disparando el número de impagos en facturas de la luz y del gas. Autónomos y familias acumulan deudas y las empresas energéticas aumentan la partida para protegerse frente a los impagos.
Según Iberdrola, con más de 10 millones de clientes en España, están sufriendo "insolvencias en el negocio comercial" y aumentan un 35% las provisiones. El presidente de la compañía, Ignacio Sánchez Galán, ha explicado que "a pesar de haber invertido 2.000 millones en España, el resultado cae un 14%, debido a las medidas fiscales y regulatorias soportadas y, también, por haber decidido mantener los precios fijos a los clientes, a pesar de los incrementos de costes que hemos sufrido ligados al precio del gas".
¿Qué pasa si no pagas un recibo?
Desde la OCU, el portavoz Enrique García explica que "hay un plazo de 20 días para pagar el recibo y a los dos meses de no haber pagado, la Compañía puede cortar el suministro y necesita poder acreditar que ha avisado al cliente".
"Cuando se reengancha la luz, tienes que pagar la cantidad que debes, más los intereses, más una cuota de reconexión", señala, "para el resto, serán las condiciones marcadas". Tienen excepción los clientes acogidos al Bono Social.
"Solo los clientes del Bono Social, y por ahora hasta el 31 de diciembre, tendrán facilidades en caso de impagos de facturas".