¿Deberían las empresas pagarnos el fisio? Ventajas y costes que se ahorran

Las posturas en el trabajo, la obesidad y el tabaco son algunos de los factores que más provocan las lumbalgias, una de las principales dolencias por las que acudimos a consulta médica y su evolución apunta al alza a pesar de que ya es la principal causa de discapacidad.

Un estudio publicado por la revista de Lancet Reumatology apunta a que esta dolencia, el lumbago, va a aumentar en los próximos 30 años al menos un 36% en la población. En concreto, en 2020, se cifra en más de 600 millones las personas que la sufrieron lumbalgia en el mundo.

Por eso, ya hay empresas que están asumiendo los gastos de su personal en fisioterapia. “Cuando yo tenía algún tipo de dolencia, ir al fisio me permitía reincorporarme mucho más rápido al trabajo. Pensé que era buena idea para los trabajadores”, cuenta un CEO de una empresa de informática donde la mayoría del trabajo es sedentario.

“Reducimos los tiempos de baja con el ahorro que se supone, a pesar de que sea un gasto extra para las empresas. Nosotros nos hemos ahorrado dinero en bajas y no solo es la baja, sino es el tiempo que el trabajador está en casa sin poder sacar trabajo adelante, eso a la empresa le cuesta más dinero que lo que puede costar el piso”, añade.

“En dos años habré hecho uso de 5 o 6 veces, ahorrando 200 euros”, cuenta uno de sus trabajadores.