El calor extremo y el incremento del aislamiento hacen del verano una época de riesgo para los mayores

Por todos es sabido que el calor afecta especialmente a las personas mayores pero no es el único problema que les llega con el verano, porque con la época estival aumenta también su soledad por las vacaciones de sus familiares o cuidadores, a la par que se limitan también sus salidas por las altas temperaturas, reduciendo así su tiempo de relacionarse.

“El calor lleva a desorientación, si hay algún ligero deterioro cognitivo por la edad puede avanzar, es decir, afecta muchísimo, tanto anímicamente y, por lo tanto, a nivel cognitivo y si no tenemos tanta actividad, afecta también a nivel físico”, nos ha contado Yolanda García, directora de calidad de Senniors.

En cuanto a las familias que se marchan de vacaciones y tienen una persona mayor a su cargo, Yolanda recomienda “preguntarles” qué prefieren y “buscar un destino inclusivo” para que nos los podamos llevar, en la medida de lo posible.

"A veces es muy recomendable buscar un referente cercano que les acompañe durante este periodo de tiempo”

“Si no nos los podemos llevar lo ideal sería turnarse entre la familia para que puedan tener siempre un referente cercano, pero si no es posible, a veces es muy recomendable buscar un referente cercano que les acompañe durante este periodo de tiempo”, ha explicado esta experta.

García apela también al uso de las nuevas tecnologías para poder mantenernos en contacto con nuestros mayores cuando estamos de vacaciones, como a través de videollamadas, para mantener ese contacto diario con ellos y alejarles de la soledad en nuestra ausencia.