Inspección de Trabajo amenaza con una huelga indefinida a partir del 26 de junio

Los sindicatos con representación en la Inspección de Trabajo y Seguridad Social han convocado este jueves a mediodía una concentración de protesta ante la Dirección General de Función Pública como por la "caótica" situación del organismo, afectado por la falta de recursos.

Solo un día después de que el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, se reuniera con CCOO, CIG, CSIF, Sitss, Sislass, UGT, UPIT y Usess, sindicatos convocantes de las protestas, para informarles de que el Ministerio de Hacienda y Función Pública no tiene intención de llevar a cabo una nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) en la Inspección, en contra de lo acordado con las centrales sindicales en julio de 2021.

El Ministerio de Trabajo acusa a Hacienda de incumplir un acuerdo con los sindicatos que habría supuesto la incorporación de 790 profesionales más y un cambio en la estructura del organismo.

Frente a esta versión, fuentes del Ministerio de Hacienda y Función Pública han asegurado que sigue trabajando "con normalidad" con el Ministerio de Trabajo "con el objetivo de ampliar el número de efectivos de la Inspección". También afirman que ya está sobre la mesa un acuerdo salarial que supone un aumento del sueldo para este año del 2,5%, y que puede llegar a un alza del 9,8% en el periodo 2022-2024.

“El acuerdo se ha llegado, no la ha ejecutado la parte socialista del Gobierno actual, el Ministerio de Trabajo se ha volcado con nosotros”, afirma Miguel Ángel Montero, Inspector de trabajo de CSIF, durante la manifestación de este jueves. Añaden que esta tarde se vuelven a reunir con el secretario de Estado de Empleo, y si no hay avances, amenazan con una huelga indefinida a partir del 26 de junio.

Las organizaciones sindicales argumentan que la anterior Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de la Inspección data de hace más de 20 años, por lo que es necesario dar cumplimiento a la que se acordó con los sindicatos e incorporar de manera inmediata los 500 efectivos que se habían prometido de manera urgente y progresivamente el resto de personal comprometido.

La plantilla de la Inspección está compuesta por 3.000 efectivos, de los que 2.200 son inspectores y subinspectores y el resto, personal de estructura, que deben atender a 20 millones de afiliados a la Seguridad Social, 1,4 millones de empresas y 10 millones de pensionistas.