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El portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, Jacinto Morano, ha acusado a la presidenta de la Comunidad de Madrid de recortar inversiones en la red sanitaria madrileña y de fomentar la privatización de las residencias de ancianos, los principales focos donde se ha expandido con virulencia el coronavirus.

"Que el 85% de las residencias sean privadas, tendrá algo que ver", sostiene Morano.

Medicalizar las residencias

Pide también Morano un esfuerzo constante por medicalizar las residencias, porque "no están medicalizadas" todavía.

"Enseñe la orden que le prohibía comprar material"

"La comunidad de Madrid no estaba preparada para esta situación", sostiene Morano, para quien una de las causas de esta situación es el 3,7% del PIB que destina la Comunidad de Madrid a gasto sanitario, "el más bajo de todas las comunidades autónomas". Por ello, continúa Morano, "la Comunidad de Madrid no estaba preparada para esta situación". Precisamente en relación con la ausencia de material, Morano ha pedido de manera elocuente a Ayuso que enseñara en público la "supuesta orden" que le prohibía comprar material sanitario.

Ayuso: "Podemos en La Moncloa es parte del problema"

Durante la réplica, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha contestado duramente al representante de Unidas Podemos en la Comunidad de Madrid. Ayuso ha acusado a la formación morada de "no haber arrimado el hombro en ningún momento" y ha criticado la labor de Podemos en el gobierno de la Moncloa, porque "son parte del problema, no la solución".

Defensa de la gestión en la red hospitalaria

La presidenta regional ha defendido con vehemencia la gestión realizada durante estos difíciles meses en la red pública de los hospitales y centros de salud madrileños.

"Cuando la gente salga a la calle, se les ha acabado el relato"

Tras afirmar que los madrileños quieren salir de esta crisis "trabajando y con dignidad" y no esperando subvenciones, Ayuso ha acusado nuevamente a la formación liderada por Pablo Iglesias de no colaborar, utilizar las televisiones para hacer propaganda y no contribuir a la salida de la crisis. Algo que, afirma, les pasará factura cuando los madrileños vuelvan a salir a la calle, pues entonces "se les habrá acabado el relato".