La tormenta que ha sufrido Palma de Mallorca el pasado martes ha dejado imágenes sorprendentes y lo peor se lo llevó el aeropuerto donde 100 vuelos fueron afectados por las fuertes lluvias por retrasos e, incluso, aviones dañados por el granizo.
Y es que el agua que ha caído en Mallorca ha sido histórica, 72 litros por metro cuadrado en una hora, con picos de hasta 90 litros, por lo que el caos el pasado martes fue absoluto en el aeropuerto cuya pista parecía un auténtico río, con los operarios con el agua por las rodillas.
La lluvia también se coló dentro de las instalaciones interiores con goteras como cascadas en las tiendas, en los pasillos y en las zonas de espera para embarcar.
La Aemet mantiene activa en el interior y el sur de Mallorca la alerta naranja por lluvias, ante la probabilidad de que se produzcan precipitaciones acumuladas en una hora de 40 milímetros.
Pero otras localidades como Murcia o Alicante también han sido afectadas por las fuertes lluvias con torrenciales de agua por las calles afectando a coches o contenedores de basura, todo arrasado por la corriente imparable.