Vecinos de Chamberí, "engañados" por el mantenimiento de las terrazas 'Covid': "El alcalde es un mentiroso"

El mantenimiento de las llamadas "terrazas Covid", anunciado este martes por la vicealcaldesa de la capital Begoña Villacís durante una entrevista en Onda Madrid ha puesto en pie de guerra, una vez más, a los vecinos de una de las llamadas "zonas tensionadas", la de Chamberí.

La vicealcaldesa le ha comentado a Juan Pablo Colmenarejo que “las terrazas covid se mantienen y he conseguido que se mantengan dos años y más”. La vicealcaldesa no cree que la medida deba ser “quitar terrazas” sino “actuar en los puntos donde se están ocasionando molestias a los vecinos". Se hará “de manera muy quirúrgica” y se van a tomar medidas como “adelantar la hora de cierre”.

La portavoz de la asociación vecinal El Organillo, Pilar Ramos, no se muerde la lengua y califica al alcalde Martínez-Almeida de "mentiroso". Asegura que el regidor les prometió que las terrazas serían temporales. Ahora, según los vecinos, el Ayuntamiento ha optado por un modelo "donde los vecinos no existimos".

"Estamos enfadados, porque nos han mentido, nos han engañado, se han reído de nosotros", afirma sin ambages. Y acusa a Vilacís de redactar una ordenanza al servicio de grandes grupos hosteleros sin pensar en los ciudadanos.

El problema, para los vecinos de la zona, está lejos de solucionarse. "Aquí no viene nadie a poner orden y mucha gente gracias a la Covid se ha puesto ciego de dinero".

Villacís: "El apoyo a las terrazas es mayoritario"

También en 120 Minutos, la vicealcaldesa ha salido al paso de estas críticas vecinales, que considera minoritarias y afirma que la propuesta de ampliación ha sido consensuada con los vecinos de la capital a través de la encuesta. El apoyo, ha dicho, es "mayoritario", al tiempo que ha recordado que siguen siendo temporales, pues su ampliación se circunscribe a dos años.

"Reconocemos que hay problemas, incluso antes de la pandemia", ha dicho Villacís, para quien la nueva herramienta de Zonas Tensionadas, cuyo funcionamiento será realidad en el plazo de un mes, atenderá las quejas vecinales y supondrá el punto de partida para solucionar los problemas de convivencia allá donde se produzan.