Vídeo: Redacción | Foto:Telemadrid
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La marcha de Juan Carlos I de España se decidió en una reunión directa entre Felipe VI y su padre, después de que, a través de intermediarios, no se hubiera logrado un acuerdo sobre la forma de evitar que el escándalo relacionado con las cuentas del rey emérito en paraísos fiscales dañase la imagen de la Monarquía.

El rey Juan Carlos I abandonará España por la repercusión de los “acontecimientos de su vida privada”

Por su parte, el Gobierno, estuvo al corriente de las conversaciones, pero la última decisión fue del actual jefe de Estado, como subrayó el presidente Pedro Sánchez en la comparecencia de este martes.

Sánchez defiende la decisión de la Casa Real de "marcar distancias" con Juan Carlos I

Una de las preocupaciones del monarca era no perder su título por lo que, tras varias semanas de conversaciones, se llegó a ese acuerdo.

“Los últimos quince días, la Moncloa estaba sometiendo a tal presión a Zarzuela que la única manera de salir de este atolladero ha sido ceder a esas presiones”, ha afirmado Mariángel Alcázar, periodista experta en Casa Real.

Alcázar ha subrayado que “había cosas que no se podían hacer por ser irreversibles como retirarle el tratamiento de rey o sacarlo de la Familia Real”.

Juan Carlos I abandonó el domingo pasado el Palacio de la Zarzuela y cruzó el lunes la frontera de España con Portugal, aunque, actualmente, se desconoce su ubicación exacta.

“El rey dijo a amigos suyos que esto era un paréntesis y que se iba para aliviar la presión sobre su hijo, pero ni se ha exiliado ni ha huido”, ha añadido la periodista.