Cuando cae el sol en este parque de Usera comienza el peligro. Y es que aquí se han producido hurtos, robos, peleas, violaciones, e incluso se han registrado dos asesinatos.
Se trata de un espacio tranquilo durante el día, pero poco iluminado y, según denuncian los vecinos, poco vigilado cuando anochece. La leyenda negra continúa debido a un numeroso grupo de personas que ha hecho del parque un territorio propio.