La ajedrecista grancanaria Sabrina Vega se negó a participar, a finales de diciembre de 2017 en el Campeonato del Mundo de partidas rápidas y semirrápidas que se celebró en Ryad, capital de Arabia Saudí dado que este país no garantiza la libertad individual de la mujer.
Un gesto que le valió el reconocimiento público en la edición de los Premios Nacionales del Deporte 2018, cuya ceremonia de entrega, fue presidida por los los reyes Don Felipe y Doña Letizia, en un acto que tuvo lugar en el Palacio Real de El Pardo.
Vega ha explicado en Onda Madrid que su decisión "no fue fácil aunque fue muy meditada. Valoré las circunstancias en las que se iba a desarrollar el campeonato y decidí no participar. En concreto, porque Arabí Saudí, entre otras cosas nos exigía jugar con velo, y respetar sus normas que van en contra de los derechos de la mujer”.
Además se ha referido al éxito de la serie ‘Gambito de dama’, de la que destaca “cómo se transmite la pasión por el ajedrez, siendo la protagonista una mujer. Precisamente creo que la serie ha tratado de naturalizar la presencia de la mujer en el deporte del ajedrez”.
Concentración y memoria
Para Sabrina Vega, hay dos creencias falsas sobre el ajedrez, “la concepción de que que el ajedrez es aburrido, cuando lo que le caracteriza es su dinamismo, y por otro lado que es solo para un perfil intelectual, cuando no es así".
En este sentido considera que "hay una serie de cualidades que son buenas para jugar al ajedrez como la concentración y la memoria, pero que se van incentivando conforme juegas. El ajedrez tiene algo que realmente engancha”.
