A horas de que se abran los colegios electorales en Estados Unidos analizamos junto a José María Peredo lo que pueda pasar. No en vano, es catedrático de Comunicación y Política Internacional de la Universidad Europea de Madrid, además de experto en política de Estados Unidos y autor del libro "Esto no va de Trump".
En clave doméstica
“Lamentablemente los norteamericanos piensan más en votar en clave doméstica y no se dan cuenta del mundo que deja atrás Trump, ni el deterioro de las relaciones internacionales”, le comenta a Juan Pablo Colmenarejo en Buenos Días Madrid de Onda Madrid. “El hecho de que la pandemia tenga el impacto que tiene, la polarización de los dos partidos, la figura controvertida de Trump, son muchos los factores que hacen que no tengan perspectiva internacional”.
De alguna manera se vota si Trump sí o Trump no. “Él se ha preocupado de construir su propia imagen y si pierde, será víctima de su propia estrategia. O habrá sido un éxito, si acaba imponiéndose”.
La clave va a estar en lo que ocurra en ocho Estados, según el profesor. “Michigan, Ohio, Winsconsin, Pensylvania, Tejas, Florida, Carolina del Norte y alguno más… se disputan en torno a 140 electores. Son los votos más dudosos y que pueden cambiar el curso de las elecciones. De los 190 en juego, 140 se concentran en esos ocho estados”
Avalancha de votos por correo por la pandemia
Peredo cree que la avalancha de votos por correo es una absoluta novedad causada por la pandemia. “En principio los registros dan idea de que Biden podría tener ventaja en voto adelantado. Porque en los registros se hace una pregunta sobre la orientación del voto. Pero es sólo un indicio. El hecho de que haya votado tanta gente (50%), podría ser que las elecciones estuvieran ya decididas”.
El profesor también se refiere a la crispación callejera y a que los comercios de algunas grandes ciudades estén blindando sus escaparates. “Hay dos factores principales. La polarización, que ha puesto en la calle a sectores violentos. Pero también la pandemia, la crisis social que produce y algo de publicidad”.
Con los ocho puntos de diferencia que separan a Biden de Trump, parece improbable que el actual presidente pueda dar la vuelta. “Pero es difícil de decir porque Trump ya ha conseguido recortar mucho en las últimas semanas. Habrá que esperar no a mañana, sino al recuento total”.