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(Actualizado

El fenónemo de las bandas latinas parece que resurge en Madrid. En los últimos días un ajuste de cuentas entre esas bandas provocaba un tiroteo en el distrito de Ciudad Lineal y en Alcorcón, en una multitudinaria pelea, veíamos hasta machetes. LLevábamos tiempo sin oír hablar mucho de Trinitarios o Dominican Don´t Play y la pregunta es si proliferan de nuevo los miembros de estas bandas.

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María Oliver, investigadora de TransGang y Katia Núñez, antropóloga y colaboradora también de TransGang, llevan años estudiando el fenómeno y actuando en primera línea de batalla dando charlas y asesorando en colegios, institutos y mediando con los propios miembros de las bandas: "Este fenómeno no es nuevo -empezó a comienzos del año 2000- con jóvenes dominicanos preagrupados y posteriormente se les fueron añadiendo posteriormente otros chavales de diferentes nacionalidades incluída la española", comenta Katia en Buenos Días.

Las bandas latinas, dicen estas investigadoras "no son un fenómeno que sale de la nada ya que este modelo está extrapolado del de Estados Unidos. De hecho los trinitarios surgieron de una cárcel de Nueva York. Luego se exportó el modelo a la República Dominicana y posteriormente a destinos como España".

¿Por qué surgen entonces estas pandillas de chavales que muestran semejante agresividad? Las investigadoras lo tienen claro: "El motivo principal por el que se forman este tipo de bandas es por toda la violencia estructural que hay alrededor y por temas estructurales como falta de recursos económicos, de trabajo y de actividades".

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¿Y por qué en Madrid están actuando en mayor medida últimamente? Sobre todo, teniendo en cuenta que en un principio eran los latin kings y los ñetas los que protagonizaban siempre los altercados y ahora las bandas dominantes son los Trinitarios y los Dominican Don't Play. Según Olvier, "en Barcelona se ha tratado bastante bien este tema porque ha habido un 'ejército' de mediadores tratando la situación de estos chavales y por tanto estas agrupaciones allí se han dormido y apenas tienen actividad pero en Madrid sin embargo no ha sucedido esto por la falta de recursos y personal preparado para tratar con ellos".

BANDAS LOCALIZADAS

Según el Ministerio del Interior hay siete grandes bandas y 70 grupos subordinados, que suman unos 1200 jóvenes controlados por la Brigada de Información y que cada vez ingresan más jóvenes en las pandillas, datos que confirman las investigadoras: "Unas 7 u 8 a nivel más extendido entre las que se encuentran las más mediáticas como ñetas, latin kings, trinitarios y ddp. Pero hay otras bandas de las que no se oye hablar apenas y hay que preguntarse por qué.

Desde la pandemia, los pocos recursos que había en Madrid han desaparecido y eso ha generado este repunte de violencia de este tipo de bandas. Si no se trabaja desde la calle con educadores y proyectos de atención, seguirán repuntando.

"Para abordar este problema social, apunta María, es necesario empezar por los propios centros escolares -desde primaria- pero sobre todo es imprescindible afrontarlo con los mediadores de calle". De hecho según cuenta la experta, en otras comunidades como Valencia o Cataluña los propios chicos pertenecientes a pandillas han trabajado algunos de ellos como mediadores tras darles una formación y ayudan a facilitar las relaciones con las bandas y a bajar la conlfictividad.

¿Cómo se capta a estos menores y cuándo se convierten en bandas violentas? "A los menores no se les capta. Ellos buscan y lo que tenemos que averiguar es qué les ofrece la pandilla que no le podemos dar nosotros como sociedad. Les dan ocio, les ofrecen ser iguales y un tipo de sociedad en la que se sienten respetados".