Activistas de la ONG Greenpeace han bloqueado desde primera hora de la mañana de este lunes 1 de julio el acceso a Madrid Central desde la calle Alcalá para protestar contra la moratoria de multas ordenada por el Ayuntamiento de Madrid, bajo el lema 'Madrid central Funciona'.
"Poniendo este freno humano en las calles de manera pacífica reclamamos al Ayuntamiento que no rebaje una medida que ha demostrado su eficacia reduciendo la contaminación a su valor más bajo en 10 años", ha indicado la organización en un comunicado, acompañado de imágenes de los activistas sentados en el suelo para impedir la entrada de coches en esta calle y con una pancarta en la que denuncian que la contaminación es la responsable de 38.000 muertes anuales.
Además, recuerdan que Madrid Central sigue en vigor "con o sin multas", y animan a los ciudadanos a seguir utilizando el transporte público y evitar ir al centro en coche: "Por eso hemos dejado libre el carril bus, permitiendo el paso a los autobuses y vehículos de emergencia".