La luz en la Cañada Real, cortada por los enganches de plantaciones de marihuana

Los vecinos de la Cañada Real han cortado la A-3. Han cumplido así sus amenazas que lanzaron ayer en Buenos Días y se han enfrentado una vez más a la Policía, que ha intervenido para restablecer el tráfico en la zona.

Los vecinos de la Cañada protestan porque les han cortado la luz. La empresa eléctrica ha detectado que se ha disparado el consumo en los últimos días y la red se ha sobrecargado. La Policía cree que se debe a varias plantaciones de marihuana en la zona.

Pero en la Cañada dicen que van a seguir “cortando carreteras y lo que haga falta hasta que nos pongan la luz, que pongan contadores y lo que sea, pero que nos den la luz”.

Llevan 15 días sin electricidad porque la red está sobrecargada un 500 por ciento, según asegura Unión Fenosa, y es probable que eso se deba a los enganches ilegales de las plantaciones de marihuana existentes en la Cañada.

"Que haga algo la Policía que sabe donde está la hierba"

“Digo yo que habrá o no habrá plantaciones –dice a Telemadrid un vecino- ¿pero había luz y luego sobrecarga? Eso no puede ser, que haga algo la Policía que sabe dónde está la hierba o lo que sea y que la quite”.

Una vecina dice que “esto no se aguanta cada vez hace más frío, hay personas mayores, niños, y tenemos que vivir”. La mayoría de las familias no tiene que ver con estas plantaciones, pero si con algunos enganches ilegales que ahora les han fallado. La situación al final es, como decía ayer una vecina a Buenos Días, que “pagan justos por pecadores”.

Disturbios en la A-3

El pasado martes por la tarde los antidisturbios tuvieron que cargar cuando varios vecinos intentaban prender fuego a una barricada de neumáticos en la Cañada Real. Los manifestantes lanzaron piedras a los agentes, quienes finalmente tuvieron que intervenir y disolvieron la concentración.

Y este miércoles la protesta se extendió y los vecinos cortaron el tráfico en la autovía A-3 saltando y rompiendo las vallas, por lo que tuvieron que ser desalojados por la Policía que impidió también que quemaran neumáticos y objetos, avanzada la noche, en pleno asfalto. Dicen los vecinos que seguirán con las protestas.