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Llevan un mes trabajando sin descanso, desinfectado las principales infraestructuras del país, residencias, hospitales, calles y trasladando fallecidos. Son los 2.500 militares que participan en la llamada ‘operación Balmis’, cuyo objetivo es la lucha contra el Covid-19.

Una operación en la que participan el Ejército de Tierra y la Guardia Real, todos ellos coordinados desde el Puesto de Mando del operativo Terrestre. Desde aquí se coordina a todos los militares de los tres Ejércitos que trabajan junto con la UME y la Guardia Real.

Descontaminación y apoyo

El teniente coronel Fajardo, al mando, explica a Telemadrid que realizan “operaciones como la descontaminación de residencias y otras en apoyo a las fuerzas de seguridad del Estado”. Comenta que “existen situaciones imprevistas, pero no improvisamos, es una operación militar de apoyo a las autoridades civiles”.

Los militares de alta graduación que atienden el centro de control señalan que “estamos en contacto continuo con el personal que está en la operación, cuando recibimos incidencias intentamos que se solucionen”.

Instalación de hospitales y otras misiones

El teniente coronel Fajardo subraya que en esta operación “las misiones se preparan en apenas 24 horas, cuando, por ejemplo, en una misión exterior suelen hacerse a 40 días vista”.

Hasta 90.000 militares han participado en esta misión de los que en la actualidad hay 2.500 con presencia en todas las provincias con misiones de desinfección en hospitales, residencias y lugares públicos.

Desde este centro de control se coordinó la instalación del hospital de Ifema o se montaron hospitales de campaña como el del Gregorio Marañón. Son tiendas preparadas hasta para 8 camas hospitalarias, que cuentan con climatización y una zona de baños. Una labor complicada, sobre todo, por las limitaciones de espacio del recinto.