La masacre en una escuela de Nashville reabre el debate sobre las armas en EEUU

El tiroteo de este pasado lunes en una escuela de Nashville, Estados Unidos, cuya autoría se ha atribuido a una mujer transgénero de 28 años y antigua alumna del colegio, Audrey Hale, ha reabierto el debate sobre la posesión de armas en EE.UU.

La mujer ha dejado 6 muertos siendo ella la séptima víctima mortal tras haber sido abatida por las fuerzas de seguridad. Las autoridades policiales han señalado que la atacante utilizó dos rifles de asalto y una pistola. Además, había dibujado mapas detallados de la escuela y dejó un "manifiesto" que los investigadores están examinando.

Las primeras hipótesis barajan la posibilidad de que se trate de alguna venganza -al haber sido antigua alumna de la escuela católica, y que esté relacionada con la reciente ley aprobada en el estado la cual prohíbe las operaciones y fármacos de cambio de género en menores de edad.

El presidente estadounidense, Joe Biden, recibió fuertes críticas tras bromear con la audiencia en una cumbre en Washington sobre mujeres emprendedoras. Lo que lleva a la oposición a cuestionar sus capacidades como presidente de EE.UU. Más tarde, condenó el ataque y subrayó que hay que hacer "más" para proteger los centros educativos de la violencia con armas.

"Debemos hacer más para proteger nuestras escuelas de forma que no se conviertan en prisiones. Pido al Congreso de nuevo que apruebe mi prohibición a las armas de fuego", dijo el mandatario al inicio de una cumbre en Washington sobre mujeres emprendedoras.

Prohibir las armas de asalto ha sido una de las principales peticiones del presidente Joe Biden desde que llegó al Gobierno y lleva desde entonces exigiendo al Congreso que actúe para prohibir estas armas de guerra que acaban siendo usadas en tiroteos como el de este lunes en una escuela de Nashville.

Suele decirlo cada vez que hay un suceso violento en la nación y también lo repitió en su último discurso sobre el Estado de la Unión, en el que pidió a los legisladores que prohíban "las armas de asalto de una vez por todas".

"Dirigí la lucha para prohibirlos en 1994. En los 10 años que la prohibición fue ley, los tiroteos masivos disminuyeron. Después de que los republicanos dejaran que expirara, los tiroteos masivos se triplicaron. Terminemos el trabajo y prohibamos las armas de asalto nuevamente", apuntó en febrero.

Biden recordó así la Ley de Control de Delitos Violentos y Cumplimiento de la Ley aprobada por republicanos y demócratas en 1994, cuando el demócrata Bill Clinton gobernaba, y que permitió prohibir, aunque limitadamente, a nivel federal las armas de asalto.