Las elecciones abren un futuro incierto en Cataluña y a Illa sujeto al juego de pactos

Uno de los titulares de esta jornada electoral es el batacazo que se da el independentismo. No suman la mayoría Junts, ERC y la CUP. Sólo llegan hasta los 59 escaños, muy lejos de la mayoría absoluta de los 68 diputados necesarios para gobernar.

Y ante este panorama, se abren varias posibilidades. Serán Salvador Illa y Pedro Sánchez quienes tendrán que elegir hacia donde inclinar la balanza. Y no será fácil, porque de lo que haga Illa en el Parlament dependerá -y mucho- el futuro de Sánchez en el Congreso.

Un posible gobierno por el lado independentista no alcanza. El tímido crecimiento de Junts de Carles Puigdemont, que sube tres escaños hasta los 35 parlamentarios, no compensa la debacle de ERC, que se deja 13 escaños y 180.000 votos. Ni sumando a la CUP, que pierde la mitad de sus votos y escaños y se queda con cuatro, sería posible un gobierno independentista. Sólo podría gobernar Puigdemont en este caso si el PSC se abstiene y le regala la Generalitat al prófugo de Junts.

Otra de las opciones, el tripartito de la izquierda que suman exactamente 68 escaños. En este caso, el PSC podrá volver al Govern catorce años después. Las cuentas van muy justas, pero la suma de los 42 diputados del PSC, los 20 de ERC, y los 6 de Comuns Sumar da 68 escaños, justo en la frontera de la mayoría absoluta del Parlament.

Posibilidad segunda, el conocido como "pacto de la sociovergencia". La suma de Illa y Puigdemont que llegarían a 77 escaños.

Aún hay una tercera opción y es la de la suma no nacionalista, entre PSC, PP y VOX que los tres sumarían los mismo que el frente de izquierdas, 68 escaños.

Con todo, las elecciones dejan un futuro incierto, supeditado a los pactos y negociaciones que puedan alcanzarse en las próximas semanas. Las dos únicas opciones más probables, por tanto, serían un gobierno de Illa o una repetición electoral, en el caso de que ERC se negara a colaborar.

En su discurso de este domingo tras saberse los resultados, el presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha descartado formar Govern junto al PSC y Comuns y ha asegurado que ahora continuarán "trabajando en la oposición".