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Más de cinco semanas desde la trágica desaparición de Ángel y Fernando -el pasado 10 de diciembre- la investigación continúa ofreciendo más incógnitas que respuestas.

De momento aún no existe un informe oficial de la prueba de ADN confirmando que la identidad de los restos hallados en el vertedero de Toledo la semana pasada correspondan al pie del pequeño Ángel.

La familia de los niños continúa convencida de que se trata de un doble asesinato, en ningún caso de un accidente en un contenedor de basura. Y apunta a la familia de la ex mujer de Fernando que residían en Toledo y la que supuestamente acudió a verla cuando se conoció su desaparición.

Las autoridades confirman que el ADN del cuerpo encontrado en el vertedero de Toledo es de Ángel

Buenos Días Madrid ha hablado en exclusiva con ella. Lucía, lo niega. "Mi familia no tiene nada que ver (...) pongo la mano en el fuego y no me quemo. No han hecho nada", sentencia tras mantener un larga conversación telefónica en la que dice que "desde que rompieron su relación, hace cinco o seis meses", no volvió a mantener contacto con Fernando".

Niega también que ella o su familia se encontraron con él en Toledo como especulan el entono familiar de los muchachos.

Lucía dice que tuvo conocimiento de su desaparición cuando un día después cuando sus padres fueron a su domicilio de Toledo para preguntar si sabía algo de ellos. "A lo dos días vienen, me tiran la puerta abajo y me pegan una paliza que flipas".

La Policía sigue buscando más restos humanos en el vertedero de Toledo

Comenta que "no sabe que ha podido pasar" y que se enteró "por la tele de que apareció su cuerpo en el vertedero". Desde entonces, comenta no ve la televisión ni sale de casa ante "las amenazas de muerte" que recibe en las redes sociales, involucrándola en la muerte de Fernando y Ángel.

Este es -dice- el motivo que le llevó a irse de su casa de Toledo, buscando refugió en casa de unos familiares.

Lucía dice que ya ha declarado ante la Policía en varias ocasiones y en la conversación confirma que Fernando era su exmarido, no su exnovio como apunta las informaciones. Mantuvieron tres años de relación que se rompió -comenta- por la mala relación que mantenía con la familia de Fernando que no quería romper la relación.