Por primera vez en España se va a construir una instalación fotovoltaica de autoconsumo colectivo para una comunidad de propietarios, y será en Madrid capital. El objetivo es el autoconsumo de la energía solar para llegar a no pagar nada en la factura de la luz o bien casi nada; es decir, una cifra mínima.
Va a ser en Madrid. Iberdrola ya ha iniciado los trámites para una instalación de 20 kilovatios que está integrada por 60 paneles solares fotovoltaicos.
Esta instalación se va a realizar en la azotea de un edificio de la calle Fernán González, en el distrito de Retiro de Madrid.
Energía limpia
Estos paneles abastecerán de energía limpia a los servicios comunitarios del edificio como los ascensores, iluminación de la escalera o el portal y proveerán a los 30 vecinos.
Además, recibirán compensación por los excedentes de la energía generada que no consuman y que vuelquen a la red, según explica a Telemadrid Jorge Morales, director de Próxima Energía.
Este tipo de instalaciones ya existen en casas particulares, por ejemplo una en Humanes de Madrid, desde cuya azotea Telemadrid nos muestra como son este tipo de instalaciones.
Aumento del ahorro
Individualmente ahorrarán un 30% y hasta un 60 por ciento en la factura colectiva, tras la inversión necesaria que requiere la instalación. Al respecto Morales dice que “depende porque primero hay que hacer un estudio individualizado, porque no es lo mismo que estés todo el rato en la vivienda, o que estés trabajando por el día, hay que analizar el consumo y dimensionar adecuadamente”
De 2.000 a 15.000 euros
“Hay que maximizar la energía que uno consume, es decir que todo lo que produzcan los paneles que se consuma en casa –dice Morales- pero la media de inversión de nuestros clientes está en unos 8.000 euros, pero hay variaciones entre 2.000 y 15.000 para edificios individuales".
"En colectivos la inversión por vecino es menor -dice Morales- porque no hay espacio para tantos paneles y suele ser entre 2.000 y 3.000 euros por vecino”.
Cuando no hay sol hay que consumir de la red, porque tener paneles no supone desconectarse de la red, “la mitad de la energía se va a autoabastecer con los paneles y la otra mitad hay que seguir comprándola en la red”, apunta Morales.