Manuela, hermana de un guardia civil asesinado por ETA: "No se puede blanquear a los terroristas"

Cuando se cumplen 10 años del anuncio de ETA del cese de su actividad terrorista, hemos hablado con Manuela Lancharro, hermana de Antonio, uno de los doce guardias civiles asesinados en el brutal atentado del 14 de julio de 1986 en la plaza de República Dominicana.

Se trata del mayor atentado cometido en la capital por ETA. Los terroristas hicieron estallar un coche bomba al paso de un convoy de vehículos de este cuerpo procedente de la Escuela de Tráfico. La explosión también provocó 56 heridos de diversa consideración.

Antonio tenía 21 años y solo llevaba 3 meses en la Benemérita cuando ETA le asesinó. 35 años después, Manuela asegura que cuando necesita "sentir a su hermano" acude a la plaza de República Dominicana donde un monumento recuerda a las víctimas del atentado.

"Ese día, rompió mi familia por completo, no solo me arrebataron a mi hermano, sino también parte de mi juventud. Mi vida cambió por completo. No saben cuánto daño me hicieron", asegura.

Manuela Lancharro se ha referido a las declaraciones del coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegui, mostrando su pesar y dolor por el sufrimiento padecido por las víctimas de ETA, y afirmando que "nunca debió haberse producido". "De primera no hay un perdón, son disculpas que les benefician a ellos. Falta una condena explícita. Nunca han tenido empatía con las víctimas, ¿qué hay detrás de esto?, ¿en nombre de quién habla?. Si quieren aliviar el dolor de las víctimas que colaboren en la investigación de los atentados que están sin resolver".

"Quiero solo justicia y que cumplan las condenas íntegramente. Han quitado vidas y no puede haber un blanqueamiento, aquí ha habido verdugos crueles y víctimas", afirma visiblemente emocionada.