Más de ocho millones de personas evacuadas en Japón por la llegada de un tifón "sin precedentes". Las autoridades locales han emitido una alerta de Nivel 5, la más alta de la escala de alerta de desastres japonesa. Al margen del destrozo que puedan causar las fuertes rachas de viento, es inminente el peligro de inundaciones y deslizamientos de tierra.
Por el momento, el tifón Nanmadol ha dejado a su paso por la isla de Kyushu, en el suroeste de Japón, unas 300.000 viviendas sin electricidad, precipitaciones récord e infinidad de ríos en condiciones de desbordarse, según informa la cadena de radiotelevisión pública NHK.
A las 8.40 hora local (23.45 GMT del domingo) Nanmadol, calificado por la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) como "fuerte", se encontraba sobre la prefectura de Fukuoka, en el extremo norte de Kyushu, arrastrando rachas máximas de viento de unos 180 kilómetros por hora.
Desde que comenzaron las lluvias que arrastra el tifón, la prefectura de Miyazaki, en el sur de Kyushu, acumula ya 1.000 milímetros de precipitaciones, un nivel sin precedentes, según NHK.
La lentitud con la que avanza la tormenta, apenas unos 15 kilómetros por hora, y su gran envergadura, están dejando abundantes precipitaciones en la mayor parte del archipiélago japonés desde hace días y, además de en Miyazaki, se ha activado la alerta por ríos en peligro de desborde en las de Oita y Kumamoto, también en Kyushu, y Yamaguchi, en el extremo occidental de la isla de Honshu, la principal del país.
Nanmadol obligó el sábado a la JMA a activar por primera vez la máxima alerta por tifón para una de las cuatro islas principales del archipiélago, una alerta que se mantiene por vientos, precipitaciones y oleaje que la JMA considera que no tienen precedente en el país.
Las autoridades están recomendado a los habitantes de las zonas más afectadas, especialmente en Kyushu, que se resguarden en sitios seguros -elevados sobre el terreno, de construcción sólida y alejados de barrancos- y que se dirijan a centros de evacuación si esto no es posible.
A su vez, ha pedido a la población de las zonas a las que se aproxima la tormenta que se abstengan de salir de sus casas.