Paloma Martín: “Con la excusa de la pandemia Sánchez limitó la expulsión de los okupas y el decreto sigue vigente”

Paloma Martín, consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, ha manifestado en una entrevista en Buenos Días Madrid de Telemadrid que la Comunidad de Madrid está poniendo todas las herramientas necesarias para luchar contra la okupación.

Comenta Martín el incremento de la okupación y los casos como el de los okupas violentos de Torrejón de Velasco que están atemorizando a los vecinos, para afirmar que “la Comunidad de Madrid defiende los intereses de los propietarios y estamos al lado de las personas que han estado ahorrando toda su vida para comprar un piso para ponerlo en alquiler o a disposición de sus hijos y han visto cómo unos desalmados han dado una patada en la puerta y han ocupado su piso”.

Asegura Paloma Martín que “estamos poniendo todas las herramientas necesarias para luchar contra la ocupación, con un teléfono para que aquellas personas que vean agredida su propiedad contacten con nosotros, reciban directamente la atención de la Policía y asesoramiento jurídico”.

Cita que la okupación ha aumentado y que entre 2015 y 2020 la okupación “se incrementó un 42%, en Cataluña fue un 68% mientras que en la Comunidad de Madrid en ese período ha disminuido un 18%”, lo que a su juicio pone en evidencia que “hay políticas más permisivas con la okupación y políticas que no lo son”.

En cuanto al alcalde de Caldes de Malavella que hacha en mano intentó echar a unos okupas opina Martín que “nadie se debe tomar la Justicia por su mano, pero hay que procurar poner a disposición de esos propietarios herramientas para tomar decisiones”.

Sánchez y los okupas

Recuerda que “con la excusa de la pandemia el Gobierno de Sánchez sacó un decreto donde limitaba la expulsión de los okupas que ocupaban ilegalmente una vivienda. Terminado el estado de alarma aún sigue prorrogada esa imposibilidad de recuperar la propiedad para sus dueños. Y esto es un mensaje negativo”.

“Lo primero que hay que hacer es no legislar atentando contra la propiedad privada, eso es lo básico, pues genera inseguridad jurídica. Hay que establecer normas que paren de manera clara la okupación”, señala.

Sobre los inquiokupas que dejan de pagar el alquiler señala Martín que estas actitudes van a más “al amparo de esta normativa que permite que se mantengan en las casas como okupas y eso produce unos efectos demoledores. Habrá menos oferta de alquiler y se incrementarán los precios, además crea una inseguridad jurídica”.

En Madrid bajó el precio del alquiler

Paloma Martín señala que “en 2021 la Comunidad de Madrid fue la única comunidad autónoma en la que bajó el precio del alquiler y las demás subieron, sobre todo en aquellas que tienen medidas que intervienen el mercado del alquiler".

En Barcelona se ha incrementado un 11,7% el precio del alquiler, cuatro puntos por encima de la inflación. Sin embargo, en Madrid hemos incrementado, pero son cuatro puntos por debajo de la inflación".

"Estamos hablando de políticas acertadas que no ponen trabas. Topar el precio del alquiler interviene el mercado y se ha visto con las medidas intervencionistas de Cataluña que, además de incrementar el precio, han desaparecido del mercado 23.000 viviendas”, explica.

El precio de la luz y el fracaso de Sánchez

Cree Paloma Martín que la medida de topar el precio del gas “lo que hace es ocultar el fracaso del Gobierno de Sánchez que vio como el recibo de la luz no dejaba de subir y no tomó ni una sola medida hasta que la situación se hizo insostenible. Cuando quiso anunciar medidas otros países ya estaban rebajando los impuestos. Demoró las decisiones un mes más y envió un plan a Bruselas donde ni siquiera han metido el decreto que se tiene que convalidar en el Congreso”.

“Oculta un fracaso, una incapacidad de Sánchez de tomar desde el principio medidas contundentes. Con el tope al precio del gas, los ciudadanos vamos a seguir pagando el doble del precio de la luz que hace un año y dicen también los expertos que las inversiones que ya están iniciadas se pueden ver impactadas por estas medidas porque les cambian las reglas en mitad del partido. Además, a medio plazo va a perjudicar el desarrollo de otras energías renovables, como el hidrógeno”, asegura.

“A día de hoy la energía 100 por 100 renovable no es posible, ni económica ni técnicamente, hay que realizar una transición ordenada"

Señala Paloma Martín que las energías renovables “es el punto a donde queremos llegar, en eso coincidimos con el Gobierno y con las estrategias fijadas por la UE, pero nos diferenciamos en cómo llegar a ese objetivo. Nosotros entendemos que la transición debe ser ordenada, con reflexión profunda de cuáles han de ser las energías de transición, el Gobierno lo que ha hecho es anteponer su ideología radical demonizando el carbón o la energía nuclear y no realizando esa transición ordenada”.

Detalla que “a día de hoy la energía 100 por 100 renovable no es posible, ni económica ni técnicamente, hemos de esperar que haya más innovación y que en ese tránsito los ciudadanos no suframos en el recibo de la luz unos incrementos desorbitados”.

“La izquierda está haciendo un salto al vacío diciendo que las energías renovables a día de hoy son posibles cuando no lo son. España depende en más de un 74% de las energías que tiene que comprar fuera de España, gas y petróleo, y sólo somos capaces de producir el 26% restante. Somos dependientes”, señala.

Apuesta Martín por que “España tome decisiones inmediatas que tenía que haber tomado ya, reduciendo los impuestos de manera sustancial”.

Explica que con esa medida “las autonomías recibiríamos menos ingresos y somos conscientes de que hay que renunciar a una parte de esos impuestos con tal de que el recibo de la luz que pagamos pueda disminuir”.

El campo, agredido por el Gobierno

Respecto a la política agraria, la consejera afirma que “la política agrícola y ganadera no se está dictando desde el Ministerio de Agricultura, sino desde el Ministerio de Transición Ecológica y el de Consumo con un ataque permanente al campo que lleva sufriendo desde hace meses la subida de los precios y si a eso le añadimos la correspondiente ración de ideología radical del Gobierno vemos que el campo se siente permanentemente agredido por el Gobierno”.