Prisión provisional por homicidio para el marido de la mujer hallada muerta en Villalbilla

  • En su declaración ante el juez el acusado negó ser el autor de la muerte de su mujer
  • El propio detenido fue quien denunció la desaparición de su pareja el pasado 31 de agosto
Foto: TELEMADRID |Vídeo: Telemadrid

Un juzgado de Alcalá de Henares ha decretado el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza del marido de la mujer hallada muerta en su domicilio de la localidad madrileña de Villalbilla, quien fue arrestado el domingo tras ser encontrado el cadáver.

El titular del Juzgado de Instrucción número 6 del municipio madrileño, que la tarde del miércoles se encontraba en funciones de guardia, le imputa un delito de homicidio o de inducción al suicidio, entre otros, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

No obstante, la calificación penal es inicial y podría cambiar a medida que avance la investigación judicial y se derivará de las diligencias que se practiquen en la instrucción de la causa.

Negó los hechos

En su declaración ante el juez, el acusado negó ser el autor de la muerte de su mujer pero el magistrado ha considerado que existen suficientes indicios de delito para decretar su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza.

Está previsto que el magistrado se inhiba en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Alcalá de Henares, cuya titular asumió las pesquisas en un primer momento.

El acusado, César, denunció que su mujer, Raquel B. L., de 54 años, había desaparecido el 31 de agosto después de ir a visitar a su madre a la localidad toledana de Yuncos, con motivo de las fiestas del pueblo, han indicado a EFE fuentes próximas a la investigación.

Y que, tras contactar con ella esa misma mañana por teléfono, cuando ella supuestamente había llegado a Yuncos, no volvió a tener noticias suyas.

La Guardia Civil abrió una investigación y solicitó una orden judicial para poder registrar el domicilio conyugal, ubicado en la avenida del Romero de Villalbilla, en la urbanización El Robledal.

La obtuvieron el domingo y encontraron el cuerpo sin vida de Raquel, tras lo que arrestaron al marido al considerar que había mentido en su denuncia.

Encuentran muerta a la mujer desaparecida en Villalbilla y detienen a su marido
Encuentran muerta a la mujer desaparecida en Villalbilla y detienen a su marido
Encuentran muerta a la mujer desaparecida en Villalbilla y detienen a su marido

Encuentran muerta a la mujer desaparecida en Villalbilla y detienen a su marido

El informe preliminar de la autopsia no ha hallado signos de violencia externos en el cadáver pero los investigadores están a la espera del análisis toxicológico del cuerpo.

Según indicó el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, la principal hipótesis es que la mujer muriera por la ingesta de medicamentos.

Intentos de suicidio

Fuentes próximas a la investigación apuntan a que la mujer había tenido dos intentos de suicidio en el pasado, a los que el hombre hizo alusión a la hora de denunciar su supuesta desaparición. En mayo, dijo, estuvo una semana ingresada en un centro hospitalario tras ingerir unas 60 pastillas de antidepresivos.

No constaban denuncias previas por violencia de género y ni la fallecida ni el arrestado estaban registrados en el sistema VioGén. Tampoco tenían hijos en común, según los primeros datos.

El Ministerio de Igualdad ha informado de que la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género está recabando datos para determinar si se trata de un asesinato machista. Sería la víctima número cuatro en Madrid en 2024.

Un vecina de la pareja ha manifestado en el programa Buenos Días Madrid que se trataba de "un matrimonio extraño. Apenas salían de casa y no se relacionaban con el vecindario. Además, solían rezar en la terraza de su casa". De hecho, se les vincula con los hare krishna.

La propia vecina afirma que estos días el detenido "solía pasear en solitario por la zona", reafirmando la hipótesis de que haya convivido este tiempo con el cadáver de su mujer, hallada en una de las habitaciones de la vivienda. "El hedor que salía de la casa cuando llegaron los agentes era insoportable", señala esta vecina.

De hecho, el marido se negó a que la Guardia Civil registrara la casa, hasta que los agentes lograron una orden judicial.