Repuntan las 'colas del hambre' y se necesitan donaciones con urgencia
Repuntan las 'colas del hambre' en Madrid y lo peor es que escasean cada vez más las donaciones para afrontarlas. En las últimas semanas la demanda de comida se ha incrementado y ahora, la posibilidad de que se reduzca la movilidad en toda la ciudad de Madrid, va a agudizar esta situación.
Repunta el hambre.
— Telemadrid (@telemadrid) September 30, 2020
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Todos los días muy temprano por la mañana, en la Plaza de San Amaro, ya hay gente esperando para que les den algo para comer, como ha podido comprobar Telemadrid. Son personas que pasan auténtica necesidad, muchas porque se han quedado sin trabajo y no cobran nada, y que hace poco tenían para vivir pero la pandemia les arrojó a la ruina.
El problema se agranda ahora, porque las donaciones para fundaciones que reparten alimentos como la Fundación Madrina, no son suficientes para atender a tanta gente.
Las colas del hambre aumentan en Madrid en pleno repunte de la pandemia y con las nuevas restricciones
Y otra amenaza se cierne en el horizonte: La del confinamiento total ronda Madrid en pleno rebrote de la emergencia alimentaria en la ciudad.
Después de una ligera merma en las 'colas del hambre' este verano, la demanda de comida se ha incrementado en las últimas semanas y las redes vecinales afrontan este repunte con menos donaciones. Varias despensas solidarias cerraron en julio por este motivo y las que permanecen operativas se encuentran desbordadas.
La Fundación Madrina pide ayuda urgente para atender a las colas del hambre
Mientras tanto, las asociaciones denuncian que la ayuda municipal, concretada en la Tarjeta Familia, llega con cuentagotas. En los barrios más pobres, las colas del hambre continúan por la amenaza del cierre de las empresas, de quedarse sin trabajo, de los confinamientos y las restricciones, y los posibles contagios.
La Fundación Madrina, que reparte cada semana alimentos por valor de 20.000 euros, intenta ayudar gracias a la solidaridad de todos. Hace un mes hacían un llamamiento urgente, porque necesitan aportes económicos y también voluntarios. Se gastan 10.000 euros a la semana en alimentos y atienden a una media de 300 a 400 personas al día bajo cita previa. Pero muchos se quedan sin recibir nada. Es la tragedia que viven cientos de personas a diario en nuestra ciudad por culpa de la crisis económica derivada de la pandemia.
