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Un hombre de 33 años ha resultado herido en el barrio de Aluche (Madrid) tras enfrentarse a unos ladrones que habían entrado a robar a su casa. Les sorprendió cuando estaban dentro de su vivienda y trató de evitar la huida de los intrusos, que le propiciaron cortes en la frente y en la ceja. El hombre logró retener en el portal a una de las ladronas hasta que llegó la policía.

El agredido se encontraba en el parque Aluche, muy próximo a su domicilio en la calle Quero, junto a su mujer, sus tres hijos y unos amigos. La mujer del padre de familia nos cuenta que su hijo pequeño se había mojado las zapatillas en una fuente, por lo que su marido fue a casa a por un par de recambio.

En ese momento, al llegar a la vivienda, se encontró con dos individuos, un hombre y una mujer, que salían del domicilio. El hombre les persiguió y, tras forcejear con el intruso, cayeron ambos al suelo.

"Se lo han llevado todo, nos han dejado en la calle"

El delincuente sacó un arma blanca con la que acuchilló al vecino en la cara y se dio a la fuga. Aun así, a pesar de las heridas, logró alcanzar a la ladrona en el portal del edificio. "La mujer decía que mi marido la estaba agrediendo", cuenta la mujer. "Él lo único que hacía era sujetarla con las manos hacia atrás, porque ella quería huir también".

Tras dar gritos y pedir auxilio, una persona que pasaba por la calle llamó a la Policía Nacional, que, cuando llegaron, detuvieron a la mujer y descubrieron que la casa estaba desvalijada. "Se llevaron, en efectivo, un aproximado de 2.000 euros, algunas joyas que me había mandado mi madre de Perú... Se lo han llevado todo, nos han dejado, prácticamente, en la calle".

Ayuda para costear el tratamiento de su hijo mayor

"Él ha ido ya a trabajar, pero bien al 100% no está", cuenta la mujer. "Está un poco mareado, le duele todavía la herida... Pero ha tenido que ir a trabajar porque son los únicos ingresos que tenemos ahora mismo".

La familia pide ahora ayuda a través de las redes sociales porque, el dinero que les han robado, era el que necesitaban para poder pagar el alquiler y hacer frente a los gastos del día a día. Además, parte de ese dinero era el que les había enviado su familia desde Perú para ayudarles a costear el tratamiento de su hijo mayor.