Ocurre en la calle Alejandro Morán, en la zona de Oporto del distrito de Carabanchel.
Los vecinos no pueden dormir a causa del ruido que ocasionan de madrugada los clientes a la salida de una discoteca. Llevan, dicen, años soportando y denunciando la situación, sin que nadie haga nada por remediarlo.
Indignación y hartazgo entre los vecinos del barrio por un problema que ven no tiene remedio. "Arman un escándalo horrible, hacen lo que quieren (...), tiran cubos de basura, rompen cristales, retrovisores, hacen sus necesidades en los portales...", narran, en Telemadrid, Paloma y Almudena, quienes comentan que la única respuesta que han recibido por parte de los dueños de la discoteca es que de su negocio "viven mucha gente".
Ocurre todos los fines de semana y se trata de una situación que viene de antes de la pandemia. Los vecinos sólo reclaman "que se les deje dormir" y que se les respete.
Ante esta situación, los vecinos optaron por poner carteles en los que se rogaba se respetase su descanso. Estos carteles ya han sido arrancados.