¿Cómo actuar en caso de atragantamiento en un niño o bebé?

En España mueren 2.300 personas cada año a causa de asfixia por atragantamiento. Actuar a tiempo es vital para salvar la vida y las secuelas por ausencia de oxígeno.

Como explica Guadalupe Fontán del Consejo General de Enfermería, la prevención es fundamental, en especial con los más pequeños. "Hay que tener mucha precaución con las piezas pequeñas, ya sean de algunos juguetes o de cosas que tenemos en casa, como los botones o pilas. También con los caramelos, en especial los que son duros. Lo mismo puede ocurrir con las canicas, monedas y globos, que pueden producir una obstrucción de la vía aérea".

Los frutos secos también son un elemento de riesgo elevado. "La recomendación es que no se den a menores de 5 o 6 años a no ser que sean molidos", asegura Fontán.

Las famosas palomitas de maíz, muy consumidas sobre todo si vamos al cine, también pueden provocar asfixia por atragantamiento, "si se van por el camino que no debe y darnos un susto".

La zanahoria, lo mejor es que los más pequeños la coman rayada, para evitar el riesgo. Respecto a las salchichas lo mejor es cortarla longitudinariamente y luego en rodajas. Con las uvas haríamos lo mismo, "cortándolas en cuatro e incluso en seis trozos, cuanto más pequeños sean más seguridad nos dará".

Atragantamientos en bebés

Según explica Guadalupe Fontán, "normalmente los más pequeños cuando sufren un atragantamiento suelen toser, pero cuando la obstrucción es completa no pueden hablar, ni respirar y si que podemos ver cómo sus labios se ponen morados".

Si el niño es menor de un año, "hay que mirar si tiene algo en la boca y no intentar sacarlo porque podemos introducirlo más. Lo mejor es cogerlo boca abajo y en la zona de la espalda, con el talón de la mano hacer 5 compresiones para intentar que expulse lo que le está provocando la obstrucción, sino habría que girarlo inclinado un poco hacia abajo y con la mano derecha y con solo dos dedos en el torax haríamos 5 compresiones, mientras llega la ayuda de los servicios de emergencia".

Si el niño tiene más de 1 año o en adultos, "es importante localizar la zona para hacer las compresiones abdominales. Esa zona está entre el ombligo y donde termina el esternón. Justo ahí, tendremos que poner el puño cerrado y con la otra mano haríamos la compresión para conseguir el impulso hacia arriba de ese objeto que está obstruyendo".

"Si vemos que ya no respira habría que hacer una maniobra de resucitación, que eso lo harían ya los servicios de emergencia", asegura.