La alerta de explosivos que causó el desalojo de la estación ferroviaria de Barcelona era falsas, según confirmó la Policía Nacional.
La alerta se activó por la sospecha de que una mujer que montó en un tren de alta velocidad (AVE) en la estación de Sants (Barcelona) con dirección a Atocha (Madrid) pudiera llevar un explosivo en su equipaje.
Sin embargo, agentes policiales detuvieron el tren antes de llegar a Madrid y comprobaron que el contenido del equipaje no era peligroso, informaron a Efe fuentes policiales.