Desmontado ya el mercadillo navideño de la Plaza Mayor, es más evidente la acción de los grafiteros en este entorno histórico.
En los últimos días han aparecido nuevas pintadas, algunas especialmente agresivas, en los soportales a la entrada de la calle de Toledo.
Pintadas en los pilares
Estos porches son los espacios más degradados en todos los aspectos de la Plaza Mayor. En ellos se aprecian restos de numerosas pintadas anteriores que los servicios de limpieza no pueden eliminar totalmente. Entre las de los últimos días, también aparecen algunas sobre los pilares del interior de la plaza.
La Plaza Mayor, que celebró 400 años durante el año pasado, es uno de los puntos que todos los turistas nacionales e internacionales visitan cuando acuden a Madrid. Tanto el rectángulo de la plaza como las calles por las que se accede a ella mantienen un trazado histórico, desvirtuado por numerosos elementos.
Recientemente se retiraron de las bases de las farolas las decenas de candados que se habían ido trabando en los últimos años, siguiendo la moda que afecta a monumentos de otras capitales, especialmente en París.
