Los vecinos de una urbanización de Pozuelo ya no aguantan más. Desde el pasado mes de septiembre unos okupas se han instalado en uno de los chalets con sus cinco perros situado en la calle Carretera de Benítez. Denuncian que son extremadamente violentos y cuentan que incluso uno de ellos ha mordido a varios vecinos.
Se trata de unos perros grandes y violentos que ya han mordido a varios vecinos y han estado a punto de matar a otro perro del barrio, tras saltar la valla de la vivienda y zafarse a mordiscos con el animal.
Una de la víctimas es Julia, que hace unos días, cuando paseaba a su perro por la zonas, fue atacada por uno de los canes, mordiéndola en la pierna. Tuvo que acudir al hospital y le pusieron la vacuna antiséptica. Buenos Días Madrid ha hablado con ella. "La situación es muy peligrosa", dice y pide a los vecinos que eviten que "los niños paseen por la zona".
Los vecinos tenen miedo porque además reciben insultos y amenazas por parte del frupo de okupas. El pasado domingo se concentraron para denunciar el caso y volverán a hacerlo el próximo sábado con la intención de presionarlos para que abandonen la casa.
Según fuentes municipales, la ocupación está en manos de la justicia y se está haciendo un seguimiento del caso. Desde el Ayuntamiento nos aseguran que están haciendo todo lo que pueden.
En cuanto a los perros, hace un tiempo se les declaró potencialmente peligrosos y se les quitó a la antigua dueña, a la que se le ha prohibido tener animales durante los próximos 10 años. Estos canes ahora los tiene cedidos a otra persona, "inquilina" de esta vivienda okupada, que por lo pronto aún mantienen su licencia.