Las calles madrileñas desiertas por la lluvia de esta noche pasada han dejado una imagen que puede ser el anticipo de la que se producirá a partir del fin de semana que viene si en la Comunidad de Madrid se aplican medidas como el toque de queda o para reducir al máximo la movilidad por las noches que parece ser el objetivo para controlar los contagios de coronavirus.
Unas restricciones que pueden afectar de lleno a los trabajadores nocturnos que dependen del transporte público para llegar a su lugar de trabajo o regresar a sus casas. "Ya tardamos bastante ahora y eso sería un desastre, No sé qué vamos a hacer", dicen.
Con el cierre de la hostelería a las once de la noche y la lluvia, este pasado miércoles apenas había viandantes por la calle y mucho menos concentraciones. De aplicarse el toque de queda podría ser de 12 de la noche a las 6 de la madrugada, momento también en que se producen esas fiestas clandestinas, en domicilios particulares o en pisos de alquiler turístico, y los botellones, focos de los mayores contagios.
A favor y en contra
Unos piensan que son positivas, según señalan a Tememadrid, y otros lo ven con mayor escepticismo, pero también hay quienes lo aceptan porque no tienen más remedio “como está la hostelería cerrada, pues yo me quedo en casa”, dice una joven. “Los que vayan a trabajar bien, los demás a quedarse en casa”, dicen otros.
Desde hace meses, entre semana, hay muy poca gente por la calle durante la noche, sobre todo desde que cerraron el ocio nocturno. La inmensa mayoría de quienes transitan son trabajadores nocturnos.
Problemas para los trabajadores nocturnos
Y para este sector quizá vengan los problemas, ya que, de restringirse la movilidad, seguramente se limitará o eliminará el transporte nocturno, con lo que quienes tienen que ir a trabajar y emplean este medio, tendrán que pensar en otras alternativas.
Muchos pasajeros de los que esperaban en las paradas de la EMT esta noche así lo han puesto de manifiesto a Telemadrid. La mayoría son trabajadores nocturnos que en circunstancias normales tardan mucho tiempo en llegar a su destino. Si ahora se restringe el transporte lo ven “fatal” porque empeora y mucho su situación.