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Óscar Martínez nos lleva a conocer la calle Corredera Baja de San Pablo, una de las calles más céntricas de la ciudad, muy próxima a la Gran Vía madrileña. Allí se encuentran grandes reliquias, como el Teatro Lara. El más antiguo de la ciudad que todavía queda en pie. Aunque, para reliquia auténtica, tenemos en esta misma calle la Iglesia de San Antonio de los Alemanes, bautizada como la capilla Sixtina madrileña.

No te puedes, sus increíbles frescos, en los que posteriormente se inspiraron artistas de la talla de Goya o su increíble altar, que recrea la popular Puerta de Alcalá. Después de recorrer esta calle, llena de lugares increíbles y desconocidos, lo normal es que te entre el gusanillo. Siempre pues aprovechar que estas en la calle Corredera Baja y parar a comerte un buen bocata de jamón en esta misma calle.

La Capilla Sixtina a la madrileña

Nuestra segunda parada ha estado llena de lujo. Adriana Abenia nos ha llevado a descubrir la calle Serrano, en el barrio de Salamanca. Todo el mundo sabe que esta es la calle de residencia de la jet set, pero es mucho más que alto standing. En esta calle puedes encontrar varias embajadas, colegios y museos tan importantes como el Lázaro Galdiano o el Museo Arqueológico, con una amplia y reconocida colección de antigüedades, donde la joya de la corona es la archiconocida Dama de Elche.

La siguiente visita ha sido hacia las afueras de Madrid, concretamente al sur de la capital, en una de las plazas más famosas no solo de Madrid, sino de España: la plaza de Chinchón. Hasta allí se ha desplazado Luis Muñoz para presentarnos la popular plaza con sus preciosos balcones verdes o claros como también se los conoce. ¿Sabías que son de uso privativo y que no siempre el propietario de la casa es necesariamente el del claro?

Claros de Chinchón: “Como Pedro por su balcón”

Si algo tiene Chinchón además de su plaza y el famoso Anís de Chinchón, son sus vecinos, auténtico patrimonio del municipio. Luis ha estado charlando con ellos y ha podido descubrirlo de primera mano, ya que no hay mejor publicidad que el boca a boca y, en el caso de Chinchón cuenta con la población chinchonense más orgullosa de serlo y de vivir allí.

La calle Imperial es nuestra última parada del programa. Hasta el epicentro del casticismo. Desde aquí se irradiaba el poder imperial en la época de los Austrias, nos ha llevado Óscar. Edificios como el Ministerio de Asuntos Exteriores –antigua cárcel y Palacio de Justicia- o la sombrerería más antigua de España también se encuentran en este lugar.