El particular homenaje de Torremocha del Jarama a la mujer trabajadora

Torremocha del Jarama es un pueblo de Madrid con más de 1.100 habitantes y que destaca por su cultura vinícola. El pueblo rinde homenaje desde 2015 a todas las mujeres mayores con una placa con su nombre en su casa. El homenaje hace honor a las guardianas de las tradiciones y costumbres del pueblo como mantener las casas abiertas, ser hortelanas, cuidar a los hijos y participar en las actividades del pueblo como la recogida del garbanzo.

Cada 8 de marzo se pone una flor a cada placa para homenajear el día de la mujer trabajadora. Una de las mujeres más destacadas del pueblo es la señora Emilia. Emilia fue practicante y médico y se encargaba de poner las inyecciones a todos los habitantes del pueblo.

Las casas de Torremocha de Jarama están construidas con piedras graníticas, una de las rocas más duras y resistentes. Uno de los edificios más destacados de la calle Uceda es la iglesia de San Pedro Apóstol. La iglesia está construida sobre una ermita románica del siglo XII.

El nombre de Torremocha viene por unas torres árabes que había en esa zona y que los reyes católicos mandaron “desmochar” (derribar la parte de arriba) para evitar secesiones feudales. En sus inicios, el pueblo recibió el nombre de Torremocha del Uceda hasta que se independizó de Uceda. Calle Uceda se encuentra en Torremocha del Jarama y recibe el nombre del lugar donde acaba la calle que es en Uceda, Guadalajara. Uno de los caminos de Santiago pasa por Torremocha.