La plaza Dos de Mayo fue la cuna de la movida madrileña

La plaza del Dos de Mayo recibe el nombre en honor al acontecimiento histórico que sucedió en Madrid con el levantamiento en contra de la invasión de los franceses. Los vecinos realizan festejos propios ya que desde hace tiempo no hay celebraciones institucionales. La plaza se encuentra rodeada de grandes avenidas, formando un pequeño oasis en mitad de centro de Madrid.

La plaza es un punto de reunión intergeneracional que ha ido evolucionando con el paso de las décadas. Los monumentos más importantes son las estatuas de Daoiz y Velarde, militares y héroes del levantamiento, y el arco de ladrillo. Las estatuas fueron hechas originalmente de cartón.

Malasaña era un barrio laberintico y a medida que fue evolucionando, la plaza se fue expandiendo y fue ganando protagonismo hasta el punto de ser uno de los sitios clave en la movida madrileña. Muchos pubs de de la década de los años 80 como el de La Vía Láctea fueron los lugares de reunión para la movida madrileña.

La zona cuenta muchos bares, terrazas, pastelerías y colegios como el CEIP Pi i Margall, que consigue atraer a m una gran diversidad intergeneracional.