Es un clásico que no puede faltar en ninguna carta de destilados. Como aperitivo, como digestivo, en cóctel... hay muchas maneras de tomarla y en los últimos años se ha convertido en la protagonista del combinado de moda: el gin tónic. Hablamos de la ginebra, una bebida sin tradición en España, que varias destilerías madrileñas ha empezado a fabricar con muy buen resultado.
El primer paso para la creación de la ginebra se atribuye a los monjes holandeses, que a principios del siglo XII utilizaron las bayas del enebro para combatir la peste bubónica. En el XVII el médico Franciscus Sylvius probó a macerar las bayas de enebro una semana en alcohol y el resultado fue un medicamento de éxito, que hoy conocemos como ginebra. Los ingleses lo descubrieron de mano de los soldados holandeses en la Guerra de los 30 años y lo comenzaron a fabricar tiempo después.
Guillermo Reviriego es un experto en destilados y ofrece en su Ristorante Kasanova la carta de destilados más grande de Madrid, con más de 900 referencias. Entre ellas están las ginebras locales; una de ellas tiene especial éxito entre las clientas, a las que llama la atención que esté elaborada por mujeres. Se trata de Monti, destilada por Teresa y Ana Monturiol, dos hermanas que comenzaron elaborando ginebra casera para uso privado hasta que decidieron profesionalizarse. El equilibrio de los quince ingredientes botánicos que utilizan y el agua de la Sierra de Guadarrama, es la clave del éxito de esta pequeña destilería de Los Molinos.
El Alambique de Santa Marta comenzó su actividad en 1999. Es un empresa familiar, fundada por José Manuel Sandín, en la que también trabajan tres de sus cuatro hijas. En 2014 presentaron la primera prueba de su Ginbear con un resultado magnífico, consiguiendo el Master Ginmotive 14. En sus instalaciones cuentan con un aula de destilación, donde se puede experimentar la emoción de fabricar la bebida.
Santamanía fue la primera destilería que abrió en Madrid tras el cierre de Chinchón. Está especializada en destilados Premium, con partidas pequeñas que persiguen la máxima calidad y exquisitez. No numeran ninguna botella más allá de 800 y utilizan una base alcohólica de uva, diferenciándose de las demás destilerías que utilizan alcohol de grano. Cuentan con varios reconocimientos internacionales y llevan muy a gala que su ginebra es craft, lo que significa que está destilada en cobre, con ingredientes naturales y pequeñas partidas.
Además de beberla de formas muy diversas, como nos mostrará el barman Andrés Rodríguez-Barbero, veremos cómo podemos utilizar la ginebra para darle un toque diferente a un guiso, preparado por la jefa de cocina del Kasanova, Danina Rosario.