El entrenador del Leganés, Javier Aguirre, lamentó no haber podido ganar en Ipurua y recordó que su equipo, con la salida de jugadores como Youssef En-Nesyri y Martin Braithwaite en el mercado de invierno, "ha perdido 22 goles y no nos pueden pedir milagros".
"Mis jugadores hacen lo que pueden, cuando jugamos bien y bonito perdemos o empatamos. Hoy era otro tipo de partido", señaló tras el encuentro un técnico mexicano que no quiere arrojar la toalla aunque la permanencia está casi imposible.
"No hago cuentas, nuestra intención es ganar los encuentros que faltan, así salimos el otro día y hoy también lo hicimos", aseguró el técnico del Leganés.
"El equipo se juega la vida todas las semanas", recalcó Aguirre, que negó que sus jugadores tuvieran falta de ambición por ganar ante el Eibar y que especularan con el empate como pareció en el tramo final.
"A veces hemos hecho 12 tiros a puerta y se nos quedó cara de tontos. Hoy iba a ser un partido así, difícil de llevar el balón al césped", analizó el entrenador del conjunto madrileño que reconoció que no tiene recursos para hacer goles.
"Javier Avilés y Manu eran los delanteros que tenía. Jugaron en Tercera Division y no podemos pedirles que salven al equipo porque hay que llevarles poco a poco y no tirarlos a los leones", sentenció Aguirre.