Alberto Aragoneses, de futbolista a combatir el coronavirus en África

Alberto Aragoneses es un trotamundos del fútbol y de la vida. Hace apenas un año nos contaba en Telemadrid dos experiencias anteriores a su última aventura en África.

Su primera experiencia fue en Brasil, en las favelas, donde fue profesor de inglés y ciencias de niños, muchos ellos hijos de narcotraficantes. De Brasil a Islandia, donde compaginó el fútbol con trabajos para la sociedad, como cortar el césped o pintar pasos de cebra.

Antes del confinamiento por la pandemia del covid-19 viajó a África Central para ayudar en la lucha contra el coronavirus.

El madrileño, de 26 años, se hizo voluntario de la ONG Meraki Bay para ayudar a aquellos que más lo necesitan en Tanzania y Zambia.

Junto con otros dos compañeros, pusieron en marcha el proyecto Zapas Limpias, que pretende recaudar dinero para que África pueda hacer frente al coronavirus: "Con tres euros tenemos para una mascarilla ayudáis a parar un gol. Si no encajamos, ganamos el partido".

Doble mérito para un futbolista sin brillo en lo deportivo, pero que deslumbra en lo humano.