Así juega el Chelsea, rival del Real Madrid en los cuartos de la Champions

El Real Madrid se enfrentará al Chelsea en los cuartos de final de la Champions League. La ida se jugará en el Santiago Bernabéu y la vuelta en Stamford Bridge. Los ingleses derrotaron al Borussia Dortmund en octavos de final por 2-1 en el global de la eliminatoria.

El gran animador del mercado de fichajes, tanto veraniego como invernal, no está respondiendo a las expectativas que se crearon al inicio de la temporada. Tras un inicio complicado a las órdenes de Thomas Tuchel la nueva propiedad del club inglés, con Todd Boehly a la cabeza, decidió dar un giro radical y anunció la salida del entrenador alemán para contratar al que era el entrenador de moda en el fútbol inglés, Graham Potter, que dirigía por aquel entonces al Brighton.

Sin embargo, este tampoco ha conseguido enderezar del todo el rumbo del equipo que se encuentra décimo en la Premier League, a 29 puntos del Arsenal, líder de la liga inglesa y a once del Totthenham, que es quien marca la zona de acceso a los puestos de Champions. Su única bala es esta.

Potter llegó teniendo que lidiar con los problemas estructurales del Chelsea y la falta de pretemporada para imponer su idea de juego, que cuenta con muchas variantes y automatismos que requieren un tiempo de adaptación.

El entrenador inglés apuesta habitualmente por un sistema de 3-4-3 con sus laterales muy adelantados para aprovechar la velocidad de Reece James y Ben Chillwell. La velocidad de ruptura de la gente de arriba y la presión tras perdida son dos de sus señas de identidad.

Kepa se ha vuelto un fijo en la portería arrebatándole la titularidad a Mendy y mostrando la seguridad y reflejos que hicieron que el Chelsea pagase 80 millones de euros por él.

Cucurella, teórico lateral izquierdo titular, está actuando de tercer central junto con Fofana y Koulibaly, en una posición completamente nueva para él, pero a la que se está adaptando de maravilla. Como prueba de ello el español recibió el MVP en el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League contra el Dortmund.

En el medio Kovacic y Enzo Fernández, por el que el Chelsea pagó casi 130 millones en invierno, son imprescindibles para Potter. Aportan contundencia, despliegue físico, salida de balón y criterio para mover la bola. Kanté sigue apartado por sus continuos problemas físicos.

Arriba cuentan con muchas alternativas, pero muy similares en cuanto a características. Pulisic, Sterling, Mount, Joao Félix, Mudryk, Ziyech, Havertz o Callagher son jugadores asociativos y con mucho desborde, pero ninguno destaca por sus cifras goleadoras.

La falta de un 9 de referencia tras la salida de Lukaku y Werner en verano se intentó suplir con la llegada de Aubameyang, que ni está ni se le espera. El máximo goleador del equipo es Havertz con ocho goles en la Premier, seguido de Sterling con uno menos.

Se espera que los titulares sean Sturridge, Havertz como falso nueve y Joao, que no está rindiendo al nivel esperado. Un único gol en ocho partidos lleva el portugués.

El conjunto inglés, a pesar de su mala temporada, es un rival peligroso, con muchos jugadores capaces de desatascar un partido con una individualidad. Se encuentra en el mejor momento de la temporada con tres victorias seguidas.

El Madrid ha conseguido evitar, hasta semifinales, a los dos cocos del sorteo (City y Bayern), que además se enfrentaran entre ellos. El Chelsea supone una dura prueba para los de Ancelotti que deberán dar su mejor versión para seguir su camino hacia la final de Estambul.