El Atlético de Madrid insistió en su "tolerancia cero ante el racismo y la xenofobia", condenó "enérgicamente cualquier expresión de este tipo que hubiera podido suceder" por parte de un sector del público en el partido ante el Atlético Baleares y anunció que está "colaborando con la Guardia Civil para aclarar estos hechos y, en su caso, identificar a los responsables".
En el encuentro de Segunda División B del pasado domingo en el Cerro del Espino de Majadahonda, el delantero brasileño del Atlético Baleares Vinicius Tanque recibió insultos racistas, según recogieron las cámaras de IB3 Televisión, cuando un sector del público profirió gritos de "mono", "mono", acompañados de sonidos "Uh, Uh, Uh" imitando a los primates.
Este martes, el club madrileño emitió un comunicado al respecto: "La postura del Atlético de Madrid siempre ha sido y será la de tolerancia cero ante el racismo y la xenofobia, por lo que condenamos enérgicamente cualquier expresión de este tipo que hubiera podido suceder el pasado domingo 31 de enero durante la disputa del encuentro entre el Atlético B y el Atlético Baleares".
"Nuestro club quiere manifestar que si se produjo un hecho tan reprobable, fue de forma aislada y residual. El árbitro del partido no fue consciente de que se produjeran dichos hechos y no reflejó nada en el acta del mismo", señala.
Los miembros de la Guardia Civil destinados a la seguridad del encuentro tampoco recogieron ningún punto relacionado con este hecho en su informe. Asimismo, el equipo rival, el Atlético Baleares, tampoco manifestó nada al respecto ni durante el encuentro ni a la finalización del mismo", añadió.
"No obstante, el club se ha puesto a disposición de las autoridades para el esclarecimiento de lo sucedido y ya está colaborando con la Guardia Civil para aclarar estos hechos y, en su caso, identificar a los responsables", aseguró el Atlético de Madrid a través de su página web oficial.