Roger Federer y Rafa Nadal jugaron el mejor partido de la historia en la final de Wimbledon 2008.
Se han respetado siempre en las derrotas. Inolvidable el llanto de Federer tras perder en Australia 2009 y el cariño de Nadal para consolarle.
También han reído a carcajadas, dentro y fuera de la pista porque su gran rivalidad no ha impedido que también sean amigos.
40 veces se enfrentaron en algunos de los duelos más espectaculares del deporte. La próxima semana se reencontrarán en la Laver Cup para volver a disfrutar juntos.