No cesan las ofrendas y los homenajes por Kobe Bryant
Irenka Zufiria
En sus 20 años de carrera derribó todos los muros, y ahora Kobe Bryant tiene el suyo. Es el muro que comparte con el rostro de su pequeña Ginni en plena ciudad de Los Ángeles.
Pocas horas después de la tragedia, padre e hija ya sonreían, como siempre, en el centro de la ciudad. Miles de aficionados gritan al cielo del Staples Center. Pasan las horas pero continúa la peregrinación a la casa de Los Lakers.
Allí, mantos de ofrendas despiden a la Mamba negra. En la otra costa, sus colores capitanean la gran manzana, y Times Square ilumina con su recuerdo.
La NBA ha suspendido el partido entre Los Ángeles Lakers y los Clippers. Algo que sólo se ha producido anteriormente por fuerza mayor.
El shock es tan grande que la franquicia ha contratado psicólogos para que Los Ángeles Lakers superen este duro golpe.
Su pérdida no deja indiferente a nadie. Los que crecieron viéndole jugar, como Tibaut Courtois, que reconoce que le afectó mucho la noticia.
Y los que crecieron por jugar con él, como es el caso de su íntimo amigo Lebron James, al que la noticia le dejó destrozado, le ha despedido hasta la eternidad a través de una carta en sus redes sociales, en la que le promete mantener su legado.
Sobre la cancha, su nombre decora las botas de Luka Doncic en honor a su huella imborrable. Sobre la pared, su sonrisa decora esta obra de arte, en honor a un legado inolvidable.