Así se hace el vestido de chulapa
Presenta mangas abullonadas en forma de farol en los hombros, escote cuadrado y diferentes bordados
San Isidro está a la vuelta de la esquina. Como cada año, desde los primeros días del mes y hasta el 15, en la capital se vivirán tradiciones de lo más castizas: beber limonada, comer rosquillas, bailar un chotis o enfundarse en su típico traje o vestido.
Por eso, hay que comenzar ya prepararse para acudir a la Pradera de punta en blanco: El traje, las boinas, los claveles...
Si este año estáis pensando en un traje nuevo o en innovar un poquito, en 'Disfruta Madrid' hemos ido al taller de Carmen 17 para ver cómo se confeccionan desde las versiones tradicionales, hasta las apuestas más modernas de los trajes de chulapo y los vestidos de chulapa.
Es el único taller de Madrid que confecciona trajes de chulapos y chulapas. Además, apoya la iniciativa del Ayuntamiento para que el resto de personas pueda confeccionar el suyo propio.
Explican que les " alegra que estos patrones estén disponibles, que la gente se anime" y añaden que "cuánta más gente se vista para apoyar la fiesta, pues mejor".
Los madrileños y visitantes podrán descargar los patrones de su traje para que puedan diseñar y confeccionarse sus propios vestidos y trajes de chulapa y chulapo para este San Isidro.
La iniciativa recibe el nombre de 'Chulapeando para San Isidro 2024'. Pero, ¿Cómo se confecciona un traje de chulapa? Lo primero es tener nociones básicas de costura si uno quiere lanzarse a hacerlo por sí mismo.
Explican en el taller que "cuando descargues el patrón, tienes que entender lo que el patrón te dice: es un plano que tiene información".
El primer paso es interpretar esa información para luego poder ejecutar y ensamblar la pieza deseada. Si no, es recomendable acudir a un taller.
El origen de estos diseños radica en el barrio de Malasaña, donde los vecinos se caracterizaban por ser algo chulescos, vistiendo de forma diferente al resto de gente de otros distritos.
Esto se consolidó en el siglo XIX y comienzos del XX y pasó a la historia como una de las costumbres más reconocibles de la ciudad.
Las mujeres se atavían con un vestido Chiné con una falda larga, ceñida y un volante en el bajo. Además, presenta mangas abullonadas en forma de farol en los hombros, escote cuadrado y diferentes bordados.
Para elaborar estos trajes se utilizan telas de algodón o, en general, tejidos que transpiran y ligeros con el objetivo de que sean cómodos en el momento de usarlos.
Por su parte, los hombres llevan un chaleco corto y estrecho adornado con un clavel en la solapa, pantalones ajustados y oscuros, gorra o boina, botines y un pañuelo blanco atado al cuello.
Se han desarrollado dos patrones en distintos tallajes: uno para el vestido y otro para el traje, compuesto por dos piezas, pantalón y chaleco. Dichos patrones digitalizados se pueden descargar a través del código QR.
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