El agua, la gran protagonista de la ruta del Pontón de la Oliva

En el norte de la Sierra Norte de Guadalajara se encuentra la ruta del Pontón de la Oliva, un camino donde la protagonista es uno de los elementos más identificativos de Madrid: el agua.

Juan Bravo Murilo trató de buscar solución al problema de abastecimiento con el que contaba Madrid. En la ciudad vivían 206 mil ciudadanos y solo tenían acceso aproximadamente 10 litros de agua por persona.

Anteriormente, los madrileños tenían que acudir a las fuentes a coger agua y a los aguadores.El lugar más importante de esta ruta es la presa del Pontón de la Oliva. Una infraestructura, junto con el resto del canal, basada en la ingeniería romana de los acueductos.

Se trata de una ruta sencilla, donde no hay desnivel, por lo que es apta para familias. Las dos mejores épocas para hacer esta ruta son otoño, por la variedad cromática, y la primavera, donde el agua está en su máximo auge.