11 días han estado los 5 toros bravos de Ciempozuelos aislados en un pequeño islote a causa de las intensas lluvias. Su dueño, Miguel, de la Finca de la Vega, sólo podía alimentarles gracias a la ayuda del cuerpo de bomberos.
Estos cinco aventureros de la ganadería Torrenueva han vuelto a casa. Miguel explica que "ayer les notamos un poquito más asustadizos", aunque después de "prácticamente 15 horas, los vemos ya con otra tranquilidad, otro pelo".
Las lluvias de todo el fin de semana anegaron el lugar con hasta dos metros de profundidad en algunos puntos. Ahora, pasado el susto, Miguel asegura que ahora estos novillos van a ser los niños mimados de la ganadería.