La capa de ozono u ozonosfera es una de las defensas naturales de la Tierra. Envuelve completamente nuestro planeta y se extiende una altura aproximada entre los 15 y los 50 kilómetros de altura.
Funciona como un escudo que la protege, al mismo tiempo que permite el paso de la luz ultravioleta necesaria para la vida en nuestro planeta.
La Tierra no es el único planeta con ozono. En las atmósferas de Marte y Venus también podemos encontrarlo porque donde hay oxígeno, puede haber ozono. Aunque para ninguno de nuestros vecinos cumple, que se sepa, una función tan importante como en el nuestro.
El alto uso de determinados gases, conocidos como clorofluorocarbonos (CFC) y utilizados en refrigerantes y aerosoles, que deterioraron esta capa de ozono, una de las defensas imprescindibles para la vida en el planeta.
Aunque, afortunadamente, en estos últimos años el descenso en su utilización ha permitido que poco a poco se vaya recuperando.