Desde que la policía cuenta con las pruebas de ADN como aliadas para sus investigaciones, los criminales lo tienen más difícil. En España comenzó a utilizarse en 1992 y solo la Guardia Civil resuelve unos 600 casos al año gracias a estas pruebas. En el suceso de Ruth y José, una prueba de ADN podría zanjar definitivamente el caso, si todavía existen rastros en los restos de la hoguera de Las Quemadillas. Pero en España hemos conocido otros casos famosos que se han resuelto gracias a esta práctica, como el de Rocío Wanninkhof, con Tony King como macabro protagonista. El psiquiatra forense José Cabrera nos cuenta cómo se obtienen y utilizan estas pruebas de ADN.