Perdieron la cabeza... ¿por amor?

¿Es posible el amor loco de juventud en los años más maduros de la vida? Tenemos buenos ejemplos de que sí. Fueron amores fugaces. Romances que nos dejaron a todos de piedra, en algunos casos por su importante diferencia de edad y en otros porque sobre ellos rondaba la sombra del montaje... Carlos Larrañaga y Ana Escribano, Pacó Marsó y Diosi, Marujita Díaz y Dinio, Sara Montiel y Toni... amor real o interesado, lo cierto es que no nos dejaron indiferentes.