Inglaterra fue campeona del mundo hace más de medio siglo. Desde entonces ha coleccionado más fracasos que éxitos cada vez que ha salido fuera de las islas a competir por un gran torneo.
El seleccionador, Gareth Southgate, devolvió la esperanza a los inventores del fútbol en las últimas citas internacionales. Sin embargo, desde entonces, ha vuelto a crecer el pesimismo entre sus fans.