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(Actualizado

Por fin habló Pedro Sánchez. Llevaba semanas sin hacer declaraciones, días y días en los que no quiso saber nada de la prensa.

Incluso el lunes reunió a los periodistas para hacer una declaración sin preguntas. No nos cansaremos de recordar que cada vez que un político se niega a atender a un periodista, el feo no es al periodista, es al lector, al oyente, al telespectador...

Que haya que estar explicando esto a estas alturas de la democracia e invocar el derecho a la información de los ciudadanos....

Porque por suerte para todos en una democracia estamos a pesar de lo que cuesta encajar como democrático que la que hasta ayer por la mañana era ministra de Justicia sea hoy Fiscal General del Estado. La democracia es respeto a la ley lo primero, si las leyes no se cumplen no hay democracia. Y en segundo lugar, la democracia es respeto a las formas. Hay una estética que conviene cumplir.

De un tiempo a esta parte hay un verdadero fervor por parte de la clase política de normalizar actitudes que son absolutamente anormales. Pero es verdad, todo va tan rápido que es imposible que podamos digerir tantas ruedas de molino como tragamos.

Una rueda de molino es la forma en que Pedro Sánchez ve impecable el nombramiento de Dolores Delgado como Fiscal General

Otra rueda de molino es que hagan pasar como normal la reunión con Torra. "Encantado" de reunirse con Quim Torra, dice Sánchez, y eso que Torra es un político inhabilitado por la Junta Electoral y confirmado por el Supremo...

Es difícil, muy difícil de entender que alguien que desobedece a los tribunales y que además se jacta de ello, acumule honor suficiente para que el presidente del Gobierno de España se reúna con él.